1.- LA
ENERGÍA
Correspondencia Manual TSH: 1º - 4 (Págs 5-6)
Sabemos que todo es energía. Sabemos que
la energía se puede visualizar como partículas de luz en constante vibración.
Esta energía que conforma el espacio vacío es lo que, según nos ha acercado el
hinduísmo, reconocemos con el nombre de Prana.
Así, el prana es energía pura, por lo
tanto, prana es inteligencia, es vida, es el origen de todas las
manifestaciones de nuestro mundo. Sin el prana, toda la materia sería inerte
Ahora tenemos que llevar a nuestra propia
experiencia esta realidad. Para que esta realidad universal te sirva de algo
tienes que hacerla tuya también. Para hacerla tuya, debes lograr acceder a
ella, re-conocerla:
Ejercicios para visualizar el Prana:
El objetivo de los ejercicios expuestos a continuación, y cuyo fin es desarrollar la capacidad de visualización etérea, sienta una de las bases de nuestro trabajo de sanación. Debemos desarrollar la capacidad tanto de visualizar como de sentir las energías.
El
desarrollo de estos ejercicios desemboca en una destreza en la percepción
extrasensorial que nos habilita, no sólo para detectar irregularidades en el
campo energético de la persona que vayamos a sanar, sino que también nos
ayudará personalmente, bien en situaciones inquietantes en las que estaremos
capacitados para desentrañar y neutralizar su naturaleza negativa, bien en
momentos maravillosos que nos deleiten pudiendo compartir con seres
inteligentes y energías sublimes la realidad elevada y sutil que llevan implícita.
Espacios
abiertos:
Sitúate
en un lugar donde te rodee la naturaleza. Si puedes, ve al campo; si no te es posible, busca un lugar tranquilo, donde te
puedas concentrar, como un parque.
Colócate
en un lugar donde te sientas cómodo. Cómodo quiere siempre decir que puedes
desconectarte de lo que te rodea, entonces en este caso se trata de buscar
sentarte, colocarte, tumbarte en un lugar donde no atraiga tu atención ningún
ruido que te moleste, ninguna atracción visual que te distraiga, nada que
afecte a tu cuerpo de manera que se te haga necesario prestarle atención. .
Puedes estar tumbado en el cesped, sentado en un banco, sentado en la hierba,
apoyado en un árbol, etc. Pero dentro de ti, no fuera.
¿Estás
ya relajado y en ti mismo? ¿Lo que te rodea es una constante que no te reclama?
¿Verdad que todo lo que existe a tu alrededor puede seguir sin ti? ¿Es tu
respiración relajada y natural? Perfecto. Entonces ya estás listo para empezar
a trabajar tranquilamente.
Te
recomiendo que no tengas demasiadas expectativas, pero sí, por favor, disfruta
tu ejercicio. Es en este estado donde se expresa la Realidad que buscamos
conocer.
Ahora,
centra tu mirada en el espacio vacío, en el aire. Date tiempo, tranquilamente,
sin prisas… La mirada no tiene que estar fija, pero sí mantenerse en el aire.
¿No
distingues movimiento, como si hubiera diferentes densidades en el espacio? ¿No
parece como que hay sombras, colores tal vez? ¿No hay movimiento en el espacio?
¿Ves sombras, luces,…?
Eso
es la Energía
Inteligente en sus estado puro, es el Prana.
Ahora,
focaliza tu vista en la copa de un árbol de tal forma que su perfil se recorte
contra el cielo. Espera un tiempo mirando su contorno hasta que sientas que se
te difumina.
¿Lo
sientes?
¿No
logras ver una especie de doble imagen de la copa? ¿No sientes que ves como una
sombra blanquecina o grisácea?
Si
no has logrado aún percibir nada de esto, no te desanimes, es cuestión de
tiempo.
Si
lo has logrado, sepas que se trata del doble etéreo del árbol.
La playa favorece la visualización porque cerca del mar el aire tiene más densidad.
¿Puedes
ir a la playa?
Cerca
del mar, mira el aire. ¿No ves como puntitos blancos brillantes o plateados
moviendose por el aire a toda velocidad? ¿Verdad que parece que tienen forma de
espermatozoides? Es la vida! Es energía inteligente.
Si
te fijas en alguien que esté situado a unos 10 metros de ti, ¿logras
ver un halo de luz en torno a él? Es su doble etéreo.
Espacios cerrados:
En líneas generales, la energía pránica en un espacio cerrado donde exista una actividad constante, por ejemplo, una casa, una oficina, etc. no es energía pura. Si lograras descender a un estado alfa y, sin salir de él, lograras visualizar el espacio vacío del lugar cerrado, verías algo parecido a la imagen de arriba.
En esa percepción,
visualizarías cómo el movimiento de los colores más puros es más veloz que el
de los colores más difusos.
En un ejemplo como el de la imagen de arriba, el color
del centro, mezcla de rojo, verde, amarillo, estaría prácticamente estático,
como si tuviera mucha materia, mucha densidad, el violeta de la izquierda
duraría muy poco tiempo en ese lugar, ya que estaría moviéndose por entre otros
colores más densos, y a través de él pasarían otros colores como el azul de la
esquina inferior izquierda.
La mayor parte de esta imagen parecería casi
estática al tener en cuenta que a través de todas estas “masas” de energía y
color viajarían hilos de luz, que serían más veloces cuanto más finos, y
especies de estrellas fugaces también de diferentes colores. A veces, estos
hilos de luz son las estelas de dichas estrellas fugaces. Esta energía tan
rápida se corresponde con el pensamiento más puro y elevado. Es por ello que no
se estanca.
Así son también las energías del Aura. Siguen el mismo modelo de
colores, densidad, velocidad de movimiento, etc..
En ocasiones, cuando miramos hacia el exterior,
debemos considerar que cabe la posibilidad de que lo que veamos sea nuestra propia aura. Pero
acerca del Aura trataremos más adelante.
La luz artificial,
no halógena, facilita la capacidad de visualización del doble etéreo, por eso
la mayoría de los ejercicios que se proponen para desarrollar la visión
periférica se plantea en espacio cerrados, con luz artificial y pared blanca.
Coloca una mano
ante tus ojos, frente a una pared blanca o amarilla. Fija tu mirada en el
centro de la mano y luego hazla viajar por tus dedos, arriba y abajo. Mira la
uña del dedo corazón y visualiza sin mirar directamente, las unas de los dedos
anular e índice. ¿No ves una nebulosa que parece que conecta entre estos dedos?
Vuelve a focalizar tu vista en el centro de la mano. ¿No ves el doble etéreo de
tu mano?
¿Tienes plantas en casa? Haz el ejercicio de visualización con tus plantas. ¿Tienes mascota? Realiza el ejercicio también con ella.
AUDIO: Respirar prana
Dado que el prana es inteligencia, es la vida en estado puro,
respirar prana de forma consciente es una técnica maravillosa para llenarnos de
vitalidad y limpiar nuestro organismo y nuestros cuerpos más sutiles.
Respiremos conscientemente, respiremos prana sin más en primer
lugar, luego respiremos prana y llevémoslo a los chakras, uno por uno. Es
decir, a las glándulas, si aún no distinguimos los chakras.
Al respirar prana y llevarlo a los chakras, conseguimos alinearlos,
y con ello sanamos nuestro sistema nervioso, logrando también un espléndido
estado de relajación.
Al respirar prana conscientemente, logramos aliviar la tensión
neuromuscular y tranquilizar la mente y las emociones. Con todo ello prevenimos
muchas enfermedades psicosomáticas, y también podemos favorecer la prevención
de cierto tipo problemas psíquicos y psicológicos que son propiciados en gran
medida por una respuesta de estrés al ritmo de vida que se nos impone.
Ir a descargar
No hay comentarios:
Publicar un comentario